Hogar comunitario
Los hogares comunitarios son una forma de vivienda compartida que ha surgido como una alternativa habitacional para personas de bajos recursos económicos.
En este tipo de vivienda, varias personas comparten un espacio común con el objetivo de reducir los costos de vivienda y compartir los gastos comunes.
Estos hogares suelen ser administrados por una organización o cooperativa que se encarga de la gestión y mantenimiento de la propiedad.
Cada residente tiene su propia habitación privada, pero comparte las áreas comunes, como la cocina, el baño y la sala de estar.
Además, los gastos de la vivienda, como el alquiler, los servicios públicos y el mantenimiento, se dividen entre los residentes, lo que permite reducir significativamente los costos individuales.
En México, los hogares comunitarios han surgido como una respuesta a la falta de viviendas asequibles y a las dificultades económicas de muchas personas.
Estos hogares ofrecen una opción más económica y solidaria para aquellos que no pueden acceder a una vivienda propia. Además, los hogares comunitarios fomentan la convivencia y el apoyo mutuo entre los residentes, creando un sentido de comunidad y pertenencia.
Los hogares comunitarios pueden ser una solución temporal o permanente, dependiendo de las necesidades y circunstancias individuales. Algunas organizaciones ofrecen programas de apoyo y capacitación para ayudar a los residentes a mejorar su situación económica y encontrar una vivienda propia en el futuro.